lunes, 30 de mayo de 2011

Nuestro Refugio


Salmos 46
1Dios es nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.
Mi hijo menor, Bernabé, tiene terror a los perros, especialmente cuando ladran, huye despavorido  por mas pequeños que estos sean y si me encuentra cerca se coge de mi de un modo tan confiado que me hace reflexionar sobre la protección que tengo en Dios.

Muchas veces debe sentir el mismo temor y al no estar yo presente, me imagino su actitud de buscar algún refugio.
Dios es nuestro amparo y fortaleza, El siempre esta presente, es nuestro pronto auxilio. La vida es dura Nuestra lucha es diaria y en los momentos de aflicción, dificultad, tormenta, al ser victimas de injusticia, al sentirnos solos, al no encontrar consuelo, al sentir de pronto angustia sin justificación, al estar en duelo o en peligro extremo, al estar extenuado por las cosas que vienen como consecuencia de nuestros errores, podemos cogernos de El.

Lo interesante es que perdemos constantemente esa visión y tratamos de solucionar a nuestra manera las cosas y lo dejamos a el con los brazos extendidos, sin prestar atención a la disposición que el Creador y dueño de todo el universo quiere darnos.
Debo recordar: Dios es mi amparo y fortaleza, pronto auxilio en mis tribulaciones.

miércoles, 25 de mayo de 2011

Creación Vs. Casualidad


En los centros de estudio tanto secundario como superior enseñan que la evolución es apoyada y aun probada por la ciencia. Por el contrario, hay mucha más evidencia científica para la creación que por la evolución. Piense un poco  sobre la evidencia que hay a favor de que la creación directa de Dios es la mejor creencia para los orígenes.

Casi siempre la explicación evolucionista para los orígenes es que todo sucedió por la casualidad. El que piensa un poco se da cuenta de que la vida compleja no pudiera haber llegado a la realidad a través de la casualidad. Supongamos que un hombre está sin trabajo. Por casualidad él ve un aviso en el diario que dice que una fábrica, al otro lado de la ciudad, está contratando gente. El sale en su auto para ir a la fábrica. En el camino se le pincha una llanta. El allí se da cuenta que alguien le robó su gata hidráulica. Pero, por casualidad, él encuentra una gata tirada al lado de la calle. Cambia la llanta pero algunas cuadras más adelante se le para el auto. Por casualidad, un hombre para y remolca su auto hasta el taller más cercano. Después de estar sin trabajo por tanto tiempo él está sin dinero. Por casualidad, el mecánico tiene en su taller otra caja de cambio que puede servir y ofrece vendérsela. Por casualidad, hay un hombre rico allí que ofrece pagar por la caja de cambio y por la mano de obra. Después de esperar un par de horas el hombre está en camino otra vez pero se pincha otra llanta. El sale caminando en busca de una llanteria. Por casualidad, él pasa por una fábrica y piensa, “Voy a preguntar aquí a ver si por casualidad necesitan más operarios.” Por casualidad, le dan trabajo allí. Al volver a su auto el nota que por casualidad la llanta pinchada está inflada otra vez. Arranca el auto y empieza a volver a su casa. El nota que su tanque de gasolina está casi vacío. No hay suficiente gasolina para llegar a su casa. Sin embargo dos cuadras más adelante encuentra que por casualidad están abriendo una nueva estación de servicio y están regalando cinco litros de combustible a todos. Casi todos van a decir, “Pare, es demasiado creer que todo esto pueda suceder por casualidad”. Cierto, pero esto es lo que los que enseñan la evolución piden de nosotros.

Una y otra vez vemos diseño en la naturaleza. Cuando hay diseño tiene que ser que hay un diseñador. Es razonable, mejor dicho, científico, decir que la naturaleza fue planeado y creado por un ser todo sabio. Tome en cuenta los siguientes ejemplos.

Encontramos el huevo de un insecto pegado a una hoja de árbol. Está atado por medio de lo que parece ser una tela de araña. Si tomamos tiempo observaremos lo que sucede con el huevo. Con tiempo vamos a ver un pequeño gusano salir del huevo. El gusano se alimenta por comer la hoja del árbol. Sigue creciendo hasta que llega a ser unos dos centímetros por largo. Después de un tiempo el gusano queda pegado a una rama del árbol y comienza a cubrirse con una tela de araña. En poco tiempo él queda envuelto en un capullo. Después de algunas semanas una hermosa mariposa sale del capullo. A través de la teoría de la evolución no hay forma de explicar esta maravillosa transformación. La idea de que este proceso maravilloso, por el cual una forma de vida se cambia en poco tiempo, a otra forma de vida, y que sigue sucediendo año tras año puede ser explicado por la casualidad sin plan o dirección es tan irracional que un hombre inteligente no puede menos que rechazarlo.

Los evolucionistas dicen que la vida compleja se desarrolla a través de millones de años de progreso lento. Pero, ¿cómo se explica el hecho de que hay pájaros como el plover del pacífico que va volando desde Alaska hasta Hawai? Para hacerlo, tiene que cruzar el océano. Tiene que ser que desde el principio tenía esta capacidad. Si no, caería en el océano porque no estaba lo suficientemente desarrollado. 

Cada pájaro construye su tipo de nido. Algunos han mantenido pájaros aislados hasta por cinco generaciones. Sin embargo, cuando están sueltos otra vez en la naturaleza vuelvan a construir el mismo tipo de nido aunque nunca habían visto uno. Tiene que ser que su Creador puso esta capacidad en ellos.

El mundo en nuestro alrededor está lleno de maravillas. Entre ellos están los órganos diseñados para desempeñar una función necesaria para la vida. Para que cumplan con su función es imprescindible que estén totalmente formados. Un órgano parcialmente formado sería inútil. Por eso, la teoría de que las formas de vida más complejas tardaron millones de años en formación es una tontería.

Los evolucionistas dicen que la religión es la traba que impide la aceptación de la evolución. Seguro es que hay los que aceptan ciegamente lo que dice su religión pero, más que nada, lo que impide a la gente aceptar la evolución es por pensar científicamente. Si alguien examina los hechos y piensa un poco, se dará cuenta de que a la teoría de la evolución le falta mucho para ser la explicación adecuada para los orígenes.

Si viéramos una hoja de árbol debajo de un microscopio. Al observar  la belleza, armonía y movimiento en la célula podríamos decir: “Tiene que ser que hay un Dios. Esto no llegó a ser por la casualidad”. Es cuestión de ponerse a pensar un poco.
¿No es razonable creer que “Todas las cosas por él fueron hechas” como dice Juan 1:3? Vivimos rodeados por “cosas hechas”. Cuando se llega a los orígenes y a la vida, hay los que exigen que creamos que estas cosas llegaron a ser por la casualidad. No. Todo fue hecho, si no por Dios, fue por los hombres. Basta de negar honrar a Dios por su creación. Lo más magnífico y complejo es la creación de Dios. Dale honor. Alábale por la grandeza de sus obras. “Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; estoy maravillado, y mi alma lo sabe muy bien”. (Salmo 139:14)

martes, 24 de mayo de 2011

El Amor es de Dios

1 Juan 4: 1-8
7 Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios.
8 El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor.
Dos cualidades que siempre tengo en cuenta de mi padre, son su rectitud y amor. De niño no recuerdo jamás haberle escuchado decir una mentira, siempre estaba al tanto para pescarle alguna pero era en vano, siempre decía la verdad. Su amor también es otra característica que recuerdo, alguna vez mis hermanos o yo desaprobamos algún examen, pero siempre su actitud fue de estimulo, recuerdo el terror de mis compañeros de escuela al pensar en como iba a ser el castigo luego de una mala calificación pero mis hermanos y yo, nunca tuvimos ese miedo, pues conocíamos la actitud amorosa de nuestro padre. Y que decir del castigo físico, no recuerdo que lo haya hecho con odio hacia nosotros, nos decía: “a mi me duele mas que a ti hijo”.

Cada vez que recuerdo aquellas cosas, puedo saber que Dios es amor, en todo tiempo, es amor en la victoria porque toda buena dadiva y todo don perfecto desciende de lo alto, es amor en la tormenta, pues todas las cosas nos ayudan a bien; es amor al disciplinarnos porque el Señor a que ama disciplina y es amor aunque perdamos todo porque El suplirá nuestras necesidades conforme a sus riquezas en Gloria.

En todo tiempo Dios es amor.

Alabado y Bendito sea Dios

En El.

miércoles, 18 de mayo de 2011

¿Cómo puede un Dios bondadoso permitir el sufrimiento?



¿Cómo puede un Dios bondadoso permitir el sufrimiento?
Hay gente que no cree que el Dios del cristianismo exista, pues es todopoderoso, pero no lo suficientemente bueno para terminar con el mal y el sufrimiento, o es bueno pero no lo suficientemente poderoso para terminar con el mal y el sufrimiento. Bien sea lo uno o lo otro, el Dios todo poderoso y completamente bondadoso de la Biblia no podría existir.

Pero el intento por demostrar que el mal niega la existencia de Dios actualmente es reconocido en casi todas las esferas como completamente infundado. ¿Por qué?

El filósofo J.L. Mackie, quien argumenta en contra de la existencia de Dios, dice: “Si existe un Dios bueno y poderoso, no permitiría el mal inadmisible; pero como existe tanta maldad absurda e injustificada en el mundo, el Dios tradicional, bueno y poderoso no puede existir”.

Muchos filósofos han detectado un defecto en este razonamiento. En la afirmación de que el mundo está lleno de una maldad absurda hay una premisa oculta; concretamente, que si el mal me parece absurdo a mí, entonces deber ser absurdo.

Obviamente, este razonamiento es falaz. El hecho de que no puedas ver o imaginar una buena razón por la cual Dios pudiera permitir que suceda algo, no significa que no haya una. De nuevo, vemos dentro de un escepticismo inflexible, una fe enorme en las facultades cognitivas de cada individuo.

Por ejemplo, si buscas a un San Bernardo en tu perrera y no ves ninguno, es razonable suponer que no hay ninguno allí. Pero si buscas una ameba en la perrera y no ves una sola, no es razonable suponer que no hay ninguna. Porque, después de todo, nadie puede verlas sin la ayuda de un microscopio. Muchos suponen que si hubiera buenas razones para la existencia del mal, estas serían accesibles a nuestras mentes, más como San Bernardos que como amebas; pero ¿por qué habría de ser así?

Aunque muchas personas no agradecen sus tragedias, también es cierto que no cambiarían por nada la sabiduría, el carácter y la fortaleza que han obtenido de ellas. Con el tiempo y la perspectiva adecuada, casi todos podemos ver que al menos algunas de las tragedias y momentos dolorosos que ocurren en la vida tienen sus aspectos positivos. ¿Por qué no habría de ser posible que, desde el punto de vista de Dios, haya buenas razones para todas ellas?

"En Defensa de Dios", Tim Keller, capítulo 2.

lunes, 16 de mayo de 2011

¿Incompleto?

Conocemos que es un rompecabezas, todos sabemos que, para disfrutar de un resultado satisfactorio, se necesitan todas las piezas. En muchos aspectos, lo mismo sucede con la vida. Pasamos los días acomodando cosas, con la esperanza de elaborar un cuadro completo uniendo todas las partes desparramadas.

Sin embargo, a veces parece que falta una pieza. Quizá hemos estado procurando conseguir las que no corresponden al rompecabezas. Aunque sepamos que la vida ha perdido su pieza principal si Dios no ocupa el centro de todo, ¿vivimos como si esto no importara? Y, aunque asistamos fielmente a la iglesia, ¿Es Él la esencia de nuestra existencia? En ocasiones, nos acostumbramos a sentirnos lejos de Dios. Esto hace que resulte más fácil pecar e impide que percibamos que nos falta algo importante.

Pero, sin importar cuánto nos hayamos alejado de Dios, Él desea que nos acerquemos. A través del profeta Isaías, apeló a Su pueblo, diciendo: «¿Por qué gastáis el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? Oídme atentamente, y comed del bien, y se deleitará vuestra alma con grosura» (Isaías 55:2).

Si te falta algo en la vida, recuerda que Dios es el único que puede satisfacerte plena y abundantemente. Permítele que complete el vacío de tu vida.

miércoles, 11 de mayo de 2011

Honra a Tus Padres



Es triste ver la gran falta de afecto que los jóvenes tienen por sus padres. Es raro encontrar una familia feliz. Tal vez nos conviene preguntarnos "¿qué estamos haciendo mal?" En parte, por lo menos, es porque los niños y jóvenes no tienen el respeto y cariño que deben tener para sus padres. Muchas veces las madres han estado al borde de la muerte para dar a luz un hijo. Por eso, es un crimen contra toda dignidad cuando su hijo la maldice.

Las emociones están entre las primeras cosas que se desarrollan en un bebé. Ellos empiezan a reconocer la atención de sus padres y responder con una sonrisa. Perciben cuando están en brazos de un desconocido. Lo ideal sería que este afecto siguiera durante toda la vida.

Joven, tú debes honrar a tus padres sabiendo que es Dios quien te los puso como autoridad. Debes expresarles tu cariño de toda manera posible. Debes prestar atención cuando ellos hablan. Ellos tienen más experiencia que tú. Te conviene oír sus consejos.

¿Qué pasa entonces si no estás de acuerdo con su opinión? En primer lugar, debes recordar que es posible que tu estés equivocado. Si, después de consultar con otros (y no únicamente tus amigos, sino con otros mayores), todavía estás convencido de que tus padres están equivocados, sería prudente decírselo humildemente; pero, a su vez diciendo, "voy a obedecerte igual porque respeto tu autoridad."

Es lamentable que haya casos de padres que no merecen el respeto de sus hijos. Por ejemplo los que tienen padres que son borrachos. Sus hijos tal vez los han visto regresar a casa por la noche ebrios y dejar a los demás temblando y llorando. ¿Qué relación deben tener sus hijos para con ellos? Si no puedes hablar bien de tus padres, es mejor callar. ¿Debe el joven tratar de corregir a su padre? Sí, pero de manera adecuada. Es una situación delicada. Por lógica, es el deber de los padres corregir a sus hijos y no viceversa. Por eso, sería bueno pensar bien en cuanto a la mejor manera de hacerlo. El momento ideal es cuando él está sufriendo por su vicio y, tal vez arrepentido. En tal ocasión va a caer bien decir, "Papá estamos orando para que dejes este vicio porque no queremos verte sufrir tanto".

¿Los hijos deben obedecer a sus padres aún cuando piden que hagan algo malo? Esa es tambien una situacion delicada. En ese caso sería prudente seguir el consejo que fue dado en cuanto a la opinión equivocada. Los hijos tienen la obligación de obedecer a sus padres. Los padres tienen autorización bíblica de castigarlos por la desobediencia. Los jóvenes que viven en casa de sus padres tienen obligación de someterse a ellos. Por lo general, son los jóvenes los responsables porque quieren un estilo de vida libertina o que perjudica la tranquilidad y felicidad de la casa. Hay casos cuando los padres son los culpables. Si un joven se encuentra en semejante situación debe esforzarse para poder vivir aparte lo antes posible. Siempre debe ser con el consentimiento de sus padres.

Los jóvenes deben pensar en el bienestar de sus padres, estar prontos a ayudar con los quehaceres de la casa y no ser una carga para ellos. No esperar que te manden hacer algo ni debes esperar una remuneración por hacerlo. Cuando ellos lleguen a la vejez tu deberás preocuparte por su bienestar. José dio un buen ejemplo. El mandó a sus hermanos a casa con carros en los cuales traerían a Egipto a su anciano padre con todos sus bienes. Algunos años más tarde José estaría al lado de su lecho de muerte. Joven, no olvides a tus padres en los últimos años de su vida. Ve a visitarlos cada tanto. Llámalos por teléfono o envíales una carta en la que cuentas lo que está pasando en tu vida; será una gran consolación para ellos saber que no son olvidados. Haz lo que puedas por su bienestar y para suplir sus necesidades.

Da gracias a Dios por tus padres. Jamás vas a saber cuantos sacrificios ellos han hecho por ti. Hónralos y obedéceles. En hacerlo pondrás un ejemplo delante de tus hijos porque Jesús dijo en Mateo 7:12: "Todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos".

lunes, 9 de mayo de 2011

El Humanismo

La gran mayoría son partidarios de la filosofía del humanismo sin darse cuenta. Aun muchos que se dicen que son cristianos han sido muy influenciados por el humanismo. La filosofía del humanismo ha sido metida en la mente de la gente sutilmente. Raras veces hacen mención del humanismo.

En las escuelas el humanismo se está enseñado bajo la materia de “ciencias sociales”. La gran mayoría de lo que está incluido en esta materia no es ciencia. Es más bien filosofía o teoría. Raras veces hacen mención del nombre “humanismo”. Los alumnos equivocadamente piensan que están estudiando otra rama de la ciencia.

Lo que se dicta no incluye todas las enseñanzas del humanismo porque ellos saben que esto chocaría con lo que, para ellos, son “dogmas y mitos de la religión tradicional”. Lo que sí enseñan es que el hombre, en sí mismo, es capaz de solucionar todos sus problemas a través del razonamiento humano.
Hay lo que se llama “humanismo cristiano”. La verdad es que es ridículo hablar del humanismo cristiano porque los dos son mutuamente exclusivos. El humanismo niega la existencia de Dios y rechaza la Biblia como una revelación divina. Lo que pasa es que hay los que son teólogos cristianos liberales que no aceptan la Biblia como una revelación divina de Dios.

Alguien ha dicho, “El humanismo y el cristianismo son sistemas mutuamente exclusivos y diametralmente opuestos. El humanismo declara que la materia es eterna, que Dios no existe, que el hombre y su entorno son el resultado de fuerzas evolutivas, que las éticas son situacionales, que nadie puede conocer una verdad absoluta, que no existe la vida después de la muerte, que los puntos de vista de la salvación son ilusorios y dañinos, que el hombre es la cosa más importante en el universo, que el hombre no tiene alma, que el cielo y el infierno no existen, y así sucesivamente”.

En vez de solucionar problemas, el humanismo ha dejado la humanidad peor que antes. A pesar del hecho que muchos han aceptado la filosofía, tenemos problemas sociales cada vez más graves. En gran parte es porque el humanismo enseña que la moralidad es relativa. Para ellos, no hay normas fijas. Todo es relativo. Lo que, para ellos, es la ley moral es lo que está aprobado por la mayoría en la sociedad. Así, lo que se acepta va cambiando. Lo que importa para la gente hoy en día es paz personal, comodidad y prosperidad. Así que, lo que amenaza uno o más de estas prioridades puede ser eliminado.

El cristianismo enseña que la vida humana es sagrada. En contraste, el humanismo aprueba de la eliminación de seres humanos si perjudican lo que los hombres quieren lograr. El humanismo aprueba el aborto, y la eutanasia. Resulta que el humanismo es más bien inhumano.

Debemos distinguir entre el de ser humanitario y el humanismo. Humanitario es preocuparse por el bienestar de la humanidad. Las humanidades se tratan de estudios sobre el arte, la música, literatura, etc. Cada cristiano debe ser humanitario pero no humanista.

Tenemos que oponernos al humanismo porque sus enseñanzas son contrarias a las enseñanzas de la Palabra de Dios. Debemos entender, y ayudar a otros a entender, la locura de la ‘sabiduría’ humana como la del humanismo”.

Arquitectos del caracter

Cada vez que nace un bebé sus padres se convierten en los arquitectos de su carácter. El niño está a la mereced de sus padres, no únicamente por su sustento, sino también por la formación de su carácter.

Hay buenos y malos arquitectos. Algunos son capaces de dibujar la fachada de un edificio. Ponen árboles y flores en el jardín y tiene un lindo aspecto. A su vez son negligentes en hacer planos del interior que incluyen todas las facilidades de gas, luz y teléfono. Resulta que es un edificio que no es muy servible. Así son los padres que fracasan en infundir carácter en sus hijos.

La razón por la cual muchos padres fracasan en infundir carácter en sus hijos es porque ellos mismos son débiles en este sentido. Es difícil dar algo a nuestros hijos que nosotros no tenemos. Nuestros hijos aprenden mucho de nuestro ejemplo. Por eso, para ser buenos arquitectos de carácter, tenemos que ser diligentes en añadir cada vez más carácter a nuestra vida. II Pedro 1:5-8 dice “Vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo”. Un buen arquitecto tiene que aprovechar de las conferencias para estar al tanto con la nueva tecnología. Las virtudes son como la tecnología que ayuda a los padres a cumplir con su deber.

Si le digo a mi hijo: “Si te portas bien voy a comprarte un juguete antes de volver a casa”. Así mi hijo aprende a esperar y exigir el beneficio.No es malo comprar juguetes a nuestros hijos, pero no como un beneficio por portarse bien.

Proverbios 22:6 manda a los padres a instruir a los niños en su camino. Es su deber. Es lo que Dios pide de los padres. El mismo versículo dice que el resultado será que, cuando fuere viejo, no se apartará del camino. Los padres que se entregan al lujo de no disciplinar a sus hijos pagan caro más adelante cuando sus hijos se ponen rebeldes. El no respetar la autoridad es una gran falta de carácter. Es nuestro deber enseñar a nuestros hijos a obedecer, si fallamos en esto, nuestros hijos tendrán grandes dificultades en su vida. El consejo de Salomón a los padres es: “La vara y la corrección dan sabiduría; mas el muchacho consentido avergonzará a su madre. Corrige a tu hijo, y te dará descanso, y dará alegría a tu alma” (Proverbios 29:15, 17).

Debemos esforzarnos en tener un buen carácter. Siempre es provechoso. Nunca será una desventaja. A su vez, es la cosa mejor que podemos dar a nuestros hijos. Hay padres que pueden dejar a sus hijos una herencia que consiste de una fortuna de bienes materiales. Más afortunados son los que reciben de sus padres una herencia que consiste en un buen ejemplo de buen carácter que infundieron en ellos. Si esperamos a que sean grandes sera demasiado tarde. Los padres que dejan a sus hijos una herencia en bienes materiales no tienen el privilegio de ver como ellos disfrutaron de su herencia. Al contrario, los que dejan a sus hijos una herencia en buen carácter pueden ver a ellos disfrutándolo hasta el día de su muerte.